- La tercera edición de Porsche Gipfeltreffen reunió a entusiastas de la marca en los Alpes, creando una comunidad unida por la pasión de conducir.
- Durante tres días, los participantes disfrutaron de rutas exclusivas por el Lago de Garda, los Dolomitas y Austria, totalizando más de 800 kilómetros de curvas.
- Desde clásicos refrigerados por aire hasta los últimos modelos, todos los Porsche demostraron su precisión en puertos de montaña legendarios.
La tercera edición del Porsche Gipfeltreffen, bajo el lema "Amore Motore", transformó la región de Bolzano en el paraíso definitivo para los amantes de la conducción. Entusiastas de Porsche y miembros de comunidades automovilísticas como Porsche Club Deutschland, Heizr y Curves compartieron tres días intensos recorriendo los puertos alpinos más emblemáticos. Con una flota que iba desde clásicos atemporales hasta los modelos más modernos, demostraron que, independientemente del vehículo, lo esencial es la pasión por el volante.
Se formó una auténtica familia Gipfeltreffen, unida por la convicción de que no importa qué coche conduzcas, lo que cuenta es conducir.
El primer día llevó a los participantes en un viaje de 300 kilómetros desde Bolzano hasta el majestuoso Lago de Garda. Tras una tranquila salida entre viñedos, la carretera comenzó a ascender hacia el puerto de Mendel, donde comenzó la verdadera diversión con curvas que aceleran el pulso. Después de disfrutar de un almuerzo junto al lago en Riva del Garda, el regreso a Bolzano permitió saborear la dolce vita en la plaza Walther, cerrando un día donde se sintió la emoción de haber conquistado la montaña.
El segundo día se dedicó a las Dolomitas, un escenario de ensueño para cualquier apasionado del motor. Casi 290 kilómetros de carreteras exigentes que pusieron a prueba las cualidades de cada Porsche. La ruta encadenó puertos legendarios como Nigra, Costalunga y Pordoi, ofreciendo un diálogo constante entre el conductor y su máquina. La jornada culminó con una parada gastronómica en el Chalet Gerard, donde los participantes compartieron experiencias con las imponentes cumbres como testigo.
Cada kilómetro por los puertos dolomíticos fue un diálogo entre el hombre y la máquina, una celebración del espíritu de Amore Motore.
El tercer y último día llevó a la caravana hacia Austria, en una búsqueda activa de curvas por 280 kilómetros de pura magia alpina. El puerto de Jaufen ofreció curvas amplias antes de dar paso al espectacular paso del Rombo. En Sölden, un desvío en el teleférico Gaislachkogel permitió disfrutar de vistas panorámicas desde el restaurante ice Q, escenario de la película de James Bond Spectre. El regreso a Bolzano a través de Hafling y Jenesien puso el broche final a una experiencia automovilística inolvidable.
Los organizadores confirmaron que estas tres rutas estarán disponibles para todos los aficionados a Porsche en la aplicación Porsche Roads a partir de la próxima primavera, permitiendo revivir la magia de Gipfeltreffen y demostrando una vez más que el amor por la conducción trasciende modelos y generaciones.